Los salones son uno de los espacios de la casa más divertidos de decorar. Esto se debe a que en el salón las familias suelen pasar tiempo reunidas, y se debe procurar que sea un espacio cómodo para todos e igual de bello.
Es decir, no es un lugar personal como el dormitorio, aquí todos los integrantes de la familia deben sentir afinidad, y hasta tiene que hacerse bonito a la vista para los invitados.
Una buena forma de conseguir una decoración que guste a todos, y al mismo tiempo satisfaga sus necesidades como familia, es elegir una decoración vintage, que está muy de moda y se carácteriza por mezclar objetos de diferentes épocas con elementos modernos.
Es una excelente forma de ahorrar en mobiliario si se tienen herencias familiares, o de honrar a los antepasados al colgar sus antiguos cuadros o pinturas.
Así que si las nuevas corrientes decorativas ordenadas y sofisticadas, como el minimalismo o el nórdico, no llaman mucho tu atención, intenta poner en práctica el vintage moderno.
1. Salón vintage moderno con toque rústico

Lo vintage también puede ser elegante y generar que el salón cobre vida y adquiera personalidad, pues lo cierto es que los elementos vintage tienen una historia que contar.
La mezcla de colores en este salón hace que tenga vivacidad, pero sin romper en lo atrevido, pues mantiene como tono principal el gris, que destaca en cortinas, sofá, suelo y alfombra.
Sin duda el color hace que aunque tenga muchos objetos vintage, como las lámparas de piso doradas, el espejo dorado, y por supuesto las butacas de terciopelo vino tinto (muy de los años 50), se sienta moderno.
Por otro lado, quisieron darle un toque rústico con la selección de las mesas centrales, las cuales son de diferentes tamaños y alturas, y respetan la forma del tronco.
2. Salón vintage modernos con muebles clásicos

Los muebles visibles en este tierno salón datan de mucho antes que el siglo pasado, no obstante las renovaciones los mantienen intactos y listos para su uso.
Esta decoración vintage moderna destaca por su simpleza y la selección de colores claros, que lo hacen un lugar muy acogedor y sobre todo tierno, donde seguramente más de uno querrá pasar sus tardes.
Las paredes con molduras de madera aportan ese aire elegante, mientras que la escalera rústica hace un buen contraste.
Los espejos envejecidos, el sofá de dos puestos y el diván generan una belleza clásica, más no imperial, que da gusto contemplar.
3. Salón vintage moderno e industrial

Cualquier artículo puede ser un factor decorativo relevante en el salón vintage moderno, es por eso que aquí se colocaron objetos un poco más industriales que muestran fuerza.
En este caso hablamos de la peculiar mesa de salón de madera y metal, el estante verde menta ubicado debajo de la ventana, y la lámpara de piso completamente de metal.
Los muebles de cuero son una belleza, y evocan robustez, lo que va muy bien con los objetos industriales.
4. Decoración vintage moderno a full color

Los colores brillantes, llamativos y muy contrastantes entre ellos hacen que este salón sea alegre e inspire felicidad.
La pared amarilla sin duda es un punto focal potente, pues es lo primero que se observa, y la misma se vistió con unos cuadros, donde destacan las fotografías en blanco y negro de dos presidiarios.
Otro aspecto llamativo es el sofá, tiene un potente color azul y es completamente de cuero, como se utilizaba a mediados del siglo pasado. Está acompañado por una butaca más sencilla de color rosado pálido, y una mesa básica de madera de líneas rectas.
Con la alfombra se quiso traer de vuelta el diseño de tablero de ajedrez que estuvo muy de moda entre la década de los 60 y 70, no obstante, este diseño data de mucho antes, pues está presente en el Castillo de Chapultepec, y otras edificaciones de siglos pasados.
5. Decoración vintage moderna con gran entrada de luz

Las grandes ventanas tienen que aprovecharse, pues no hay nada mejor como la luz natural. Y precisamente eso fue lo que hicieron en este gran salón con una pared completa de ventanas al dejarlas descubiertas y visibles, ya que tienen un hermoso diseño de cristales cuadrados pequeños con marco de metal negro.
Al tener el techa tan alto y tanta entrada de luz natural es posible crear una decoración como esta donde los colores oscuros resaltan, sin que se vea oscuro y fúnebre.
La pared de ladrillos se utilizó como lienzo para comenzar a crear una hermosa obra de arte, encabezada por las puertas indias, las cuales están rodeadas de cuadros y dos mesas, una cada lado con elementos decorativos.
Los muebles de cuero de diferentes tamaños y formas nos muestran un salón muy atemporal pero con bastante personalidad.
6. Salón vintage moderno decorado con retratos antiguos

Si eres de los que busca algo menos llamativo, y más tradicional, dejamos esta muestra que releva que lo vintage también puede ser cálido, y moderno al mismo tiempo.
La habitación es bastante clara, y las paredes blancas aportan amplitud, mientras que la mesa de salón y la chimenea, ambos del mismo tono oscuro, son el principal atractivo.
La selección de dos sofás iguales del mismo tono rosado claro aporta simetría, y hace que el visitante enfoque la vista directamente hacia la pared de la chimenea donde están los retratos. El diseño con el que se pintó esa pared también la hace resaltar.
Estas ideas para decorar salas vintage seguro que también te inspirarán.
7. Salón pequeño con decoración moderna y vintage

El salón pequeño también puede acomodarse con una decoración vintage. Solo debes tratar de utilizar muebles no demasiado grandes que hagan que el espacio sea intransitable.
El sofá pequeño de varios estampados aporta belleza y distinción, y se utilizó una escalera de madera como estantería para colocar adornos. Es ideal porque ocupa espacio hacia arriba, pero muy poco horizontalmente, lo que permitió que entraran los otros adornos de madera y la maleta.
La mesa de centro tiene buen tamaño y la madera negra es elegante, además que se destaca, pues las paredes y el suelo son muy claros.
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