Si quieres una decoración fresca y juvenil, pero al mismo tiempo clásica, para el cuarto del niño, entonces la combinación de azul y blanco es tu mejor opción.
Estos colores son muy versátiles y combinan muy bien con diferentes elementos decorativos, solo necesitas de mucha creatividad.
Para ayudarte te traemos 5 tips para decorar una habitación de niño azul y blanca, para que le regales a tu hijo un espacio hermoso y divertido a la vez. ¡Comencemos!
1. Coloca diferentes patrones en las paredes y toques de colores brillantes y neutros

Si bien la combinación de azul y blanca es muy vistosa, tendrá mayor proyección visual si la complementas con patrones en paredes y objetos de otros colores que destaquen, para personalizar el recinto.
En este sentido puedes colocar textiles y mantas en colores brillantes como el rojo, amarillo o naranja, debes cuidar de distribuirlos en forma comedida para evitar que provoquen cansancio visual.
Respecto a los patrones, te sugerimos usar papel tapiz con motivos geométricos en azul y blanco.
2. Distribuye equitativamente el azul y el blanco

Recuerda que, en esta combinación, estás usando un color que tiende a ser oscuro con otro que es muy luminoso, por lo que debes combinarlos de tal manera que complementen sus características.
Para crear una decoración equilibrada procura usar estos colores en forma proporcional, por ejemplo, si pintas las paredes en azul, usa ropa de cama y mobiliario en blanco.
3. La madera encaja muy bien en la decoración con azul y blanco

La madera le prestara un encanto rústico que hace que, el dormitorio azul y blanco del niño, tenga una calidez decorativa que invita a permanecer en él.
Para ello puedes colocar una cama con otros muebles de madera en tono natural o, si lo prefieres, incluye detalles como cuadros o fotos con marcos gruesos y estantes también de madera.
4. Agrega una alfombra que haga juego con la combinación blanca y azul

Colocar una alfombra es la mejor manera de dar textura y profundidad a la escena, para que la decoración no luzca plana y el ambiente se sienta cálido y acogedor.
Selecciona una alfombra que combine con el azul y blanco, por ejemplo, que sea de colores neutros, si es de algodón o lana tanto mejor porque además dará un aspecto elegante.
5. Innova colocando 2 paredes de acento

Por lo general se usa una pared de acento, pero… ¿Qué te impide usar 2 de ellas?, así además de añadir mayor interés al dormitorio azul y blanco del niño, lo hará único y muy original.
Para ello coloca vinilos, papel tapiz o píntalas de manera muy creativa. Puedes colocar otros ornamentos que sean discretos para que la pared sea el centro de atracción.
Con las propuestas que te hemos dado, podrás diseñar el dormitorio azul y blanco del niño de tal manera que su confort este asegurado y se sienta feliz en él.
Para otros consejos de decoración no solo para el dormitorio de tu hijo, sino también para todos los ambientes de tu casa, visita a Decoratips.